Título: Eva Luna.
Autora: Isabel Allende.
Editorial: Random House Mondadori.
Páginas: 286.
En Eva Luna, su tercera novela, Isabel Allende recupera su país a través de la memoria y la imaginación. La Cautivadora protagonista de esta historia constituye un nostálgico álter ego de la autora, que se llama a sí misma «ladrona de historias» precisamente porque en las historias radica el secreto de la vida y el mundo. Novela de hondo perfil humano, Eva Luna funde el destino individual con el colectivo mediante una fulgurante prosa de carácter épico. Sin duda, una de las mejores obras de la literatura latinoamericana de los últimos años.
Opinión personal: Eva Luna es un libro de aventuras, una obra que nos
cuenta la historia de un país, del comportamiento humano y que llega a
enfrentar los recursos de la gente pudiente con los de la gente pobre. Sin
duda, es una novela que nos mantiene enganchados de principio a fin, narrada
con frescura y que permite que los personajes nos conquisten.
Aun así, cuando lo leí lo hice pensando en
el papel que tenía la mujer en sus páginas, pensando en cómo abordar el tema en
este blog, y poco a poco me di cuenta de que, además de una novela sobre
historia, es una novela con tintes feministas, pues, desde su protagonista, que
es mujer, vemos el punto de vista de estas en la situación del país, que muchas
veces ha pasado inadvertida, y, por ello, quería hacer un repaso por todos los
personajes que han tenido gran influencia en el punto de vista femenino del
libro y el desarrollo de este.
En primer lugar tenemos a Eva Luna, la
protagonista, una niña carismática que es huérfana y se gana el cariño de todas
las personas a las que se acerca contando historias. Mediante sus ojos vemos
cómo las mujeres tenían que esconderse en esta época; incluso vive la mayor
parte de su infancia con su madre en casa de un hombre que, hasta pasados los
años, ni siquiera se da cuenta de que ella existe, y, además, se nos presenta
la retrógrada idea de que las mujeres no tenían otro objetivo vital que
casarse.
En este personaje vemos también la
explotación infantil, pues muchos niños, sobre todo niñas, que eran huérfanos,
tenían que resignarse a trabajar para personas adineradas; en su caso, comienza
a servir a una mujer pudiente realizando "trabajos de mujer", es
decir, que actúa como su criada siendo tan solo una niña, pero vemos siempre en
ella un espíritu rebelde, pues con tan solo siete años es lo suficientemente
valiente como para enfrentarse a la mujer a la que sirve y huir de su destino
de resignarse a trabajar para los otros sin nada a cambio, donde, además, tiene
que soportar los tocamientos indebidos del hombre de la casa y no puede
evitarlo porque es este matrimonio quien le da un techo.
Debido a todos estos inconvenientes y a
ser huérfana, Eva Luna acaba viviendo en la calle durante algunos periodos y
aprendiendo también sobre la vida callejera a pesar de que no fuese un lugar
considerado para las mujeres, pero incluso Humberto Naranjo, su mejor amigo, a
quien conoce en la calle, le prohíbe permanecer a la intemperie y la envía al
hogar de una de sus amigas, porque como él mismo piensa, "al crecer tenía
más necesidad de ser protegida por un hombre" (Allende, 2013).
Otra de las personas con las que tropieza
Eva Luna al abandonar a su siguiente, patrona, la amiga de Humberto Naranjo, es
Riad Halabí, un hombre moro que decide adoptarla debido a la infertilidad de su
mujer, con quien Eva Luna aprende a leer y a escribir y vive algunos de sus
años más felices. Este hombre le da lecciones de vida como que "debes
estudiar para mantenerte por ti misma, no es bueno depender de un marido"
(Allende, 2013), y nos muestra cómo en la época había personas innovadoras que
aceptaban el cambio, pero cómo también era complicado que una mujer pudiese
tener estudios y no depender de un hombre. Aun así, la protagonista debe huir
de esta vivienda después del paso de los años, pues debido a un encuentro
sexual con Riad Halabí todo el pueblo comienza a hablar sobre ella, y como es
mujer la culpan de sus propias decisiones llamándola "aprovechada" o
"buscona", un ejemplo sobre cómo las mujeres de la época no podían ni
siquiera tomar la decisión sobre con quién acostarse porque iban a ser
criticadas y menospreciadas incluso por las propias mujeres.
En conclusión, Eva Luna es una joven a
quien la vida no sonríe, que pasa por muchas penurias y desgracias, pero, a
pesar de todo, su valentía y sus ansias de libertad la llevan de un lugar a
otro y le permiten mostrar su arte y anteponerse a todas las visiones machistas
que la atosigaban incluso cuando eran tan solo una niña.
Otro personaje en el que no ahondaré con
profundidad pero sí me parece importante tratar es Consuelo, la madre de Eva
Luna, que es una joven que nació en una tribu india y fue huérfana, que se
enamora de un portugués pero es arrebatada de él porque la fuerzan a acudir a
un colegio de monjas en el que le cambian el color de pelo y se lo cortan,
quitándole su libertad y la voluntad de decidir incluso sus rasgos físicos. Le
inculcaron de tal forma la idea de que necesita trabajar para sobrevivir que
incluso da a luz a Eva Luna mientras trabaja, sin pararse a descansar.
Por otra parte, tenemos que hablar sobre
la madrina de Eva Luna, a quien su madre deja la custodia al fallecer y quien
la envía a trabajar con tan solo siete años. Es descrita como una mujer hosca y
abultada, similar a Dulcinea, de Don Quijote de la Mancha (1605). Desde que su
ahijada es una niña le transmite conocimientos como que tocarse el cuerpo es un
pecado que tiene que ir a confesar al cura; es una mujer tradicional que ha
trabajado sin descanso durante toda su vida, y, en mi opinión, Allende nos
muestra con ella el camino que tenían las mujeres que no se casaban en esta
época, que era el de la soledad y la locura, el de trabajar y no poder tener
una vida plena y libre.
Es un personaje hiperbólico, el hecho de
no estar casada le hace cometer muchos actos que ella opina que son pecados,
como acostarse con un hombre, y es "castigada" con un hijo de dos
cabezas que nace sin vida. Todo esto hace que entregue su vida a Dios y que
cometa atrocidades como coserse su propia vagina o caer en la locura y acabar
internada en un hospital mental. Isabel Allende nos quiere mostrar a una mujer
de campo y la importancia del matrimonio, y lo consigue exagerando lo que
sufrían en esta época las mujeres que no accedían a él y que querían ser
independientes.
Hay dos personajes que también son
importantes en la historia de la protagonista, que son Zulema y Mimí. La
primera de ellas es la mujer de Riad Halabí, a quien ya mencioné con
anterioridad, es decir, que esta mujer se convierte en la madre adoptiva de Eva
Luna y es descrita como otra mujer desdichada a causa del matrimonio, pues,
aunque su marido sea siempre descrito como un buen hombre, ella no lo ama y se
casa con él porque si no accede al matrimonio con alguien nadie la validará
como mujer. Es la otra cara de la madrina de Eva Luna, es quien nos muestra
cómo el matrimonio no es la salvación, sino que también puede convertirte en
una persona desdichada. Allende nos muestra que el problema no es estar o no
casada, sino no tener libertad, y que no se puede amar a alguien a pesar de
todas las veces que se nos diga que "siempre se llega a amar al marido, si
se pone en ello suficiente voluntad" (Allende, 2013).
Zulema, al casarse, se va con Riad Halabí
a un lugar en el que ni siquiera domina el idioma, y, por tanto, se queda
encerrada con él, pues es la única persona con la que puede comunicarse.
También la embarga la frustración de no poder tener hijos y, finalmente, se
quita la vida, pues a pesar de seguir todas las indicaciones que se le exigían
como mujer no ha logrado ser feliz.
Por otra parte, tenemos al personaje de Mimí,
personalmente de los más completos de la obra. Destaca porque es una mujer
transexual, y me alegra que se haya dado visibilidad a las mujeres transexuales
en esta obra, pues también son mujeres y nos muestra, en estas páginas, cómo
también ha sufrido las consecuencias de ello. Mimí es una mujer incomprendida
que es consciente de que es una mujer, pero nadie le hace caso y todos la
ningunean y tiene que pasar su vida sin atreverse a mostrar su verdadero 'yo';
si en esta época existía un machismo tan amplio, a las mujeres transexuales ni
siquiera se las consideraba existentes.
Nos cuenta en primera persona que siempre
se la consideró un fallo y cómo tuvo que soportar la visita a innumerables
psiquiatras hasta que no pudo más y escapó de su casa diciendo "no soy
marica, soy mujer", un acto de valentía que nos muestra la rebelión de
este personaje tan completo. Tras este suceso va a trabajar a un cabaré de
transformistas, donde por primera vez puede expresar su verdadera identidad
vistiéndose de mujer. Sin embargo, un día la encarcelan acusándola de ser
pederasta, y esto es una muestra sobre lo complicada que era la vida de las
personas transexuales en la época, sobre cómo nadie las aceptaba y eran
juzgadas por ideas preestablecidas aun sin haber cometido ningún delito.
Nos cuenta también que en la cárcel no
recibía mejor trato que un animal y que incluso la internaron en una celda de
"sujetos especialmente peligrosos". Por otra parte nos habla sobre su
soledad al salir de prisión, sobre cómo los hombres no se atrevían a acercarse
a ella por ser transexual, y cómo, por tanto, comenzó a desarrollar dependencia
por los pocos que sí lo hacían. Aun así, este personaje es carismático y
valiente, es una mujer que se hace un hueco en el mundo de la fama, pues se
convierte en actriz debido a su belleza y acaba teniendo una vida libre y
feliz, pudiendo ser quien es verdaderamente, un guiño de Isabel Allende para
mostrar que las mujeres transexuales también son mujeres y tienen derecho a
luchar por sus sueños y conseguirlos.
Por último, debo hablar sobre Rolf
Carlé, el otro protagonista de la novela, que nos va contando su historia y la
de su familia de forma paralela a Eva Luna; mientras la de ella sucede en
Latinoamérica, la de él sucede en Europa. En mi opinión, su historia familiar
es la más impactante y machista de las historias que se cuentan en el libro.
Rolf Carlé nace en una familia europea en
mitad de las guerras mundiales, una familia tradicional, cuyo padre es
respetado y temido por todo el pueblo, y, como todos lo despreciaban pero no se
atrevían a enfrentarse a él, lo hacían con Rolf, que, debido a esto, nació y
creció rodeado de soledad. Él es lo contrario a su padre, un hombre fuerte pero
también sensible y comprensivo que ve el lado bueno de la vida a pesar de
todo. Sin embargo, me quiero centrar en Lukas Carlé, su padre, que es el
estereotipo de hombre maltratador y nos cuenta, desde su primera aparición, que
contuvo matrimonio con su mujer por conveniencia, que, para él, su mujer era
inferior y que solo se casó con ella por su herencia, por sus caderas anchas
para procrear y porque quería tener a una mujer que cuidase de la casa.
Además, solía irse de la casa para
encontrarse con prostitutas y verlas desfilar con tacones. Incluso encerraba a
sus hijos para no verlos porque se avergonzaba de que no fueran "hombres
de verdad" y culpa a su mujer, pues, como él mismo dice, “nada tan
peligroso como una mujer para corromper la buena semilla del varón” (Allende,
2013). En conclusión, este hombre es el prototípico hombre machista y
maltratador que, desgraciadamente, aún existe, es temido y repudiado por su
familia y nos muestra, desde dentro, la situación familiar de muchas familias
maltratadas, nos hace reflexionar y sentir repulsión también a los lectores.
Para finalizar, podemos ver a la propia
Isabel Allende dando su opinión sobre el personaje de Eva Luna en este vídeo:
ALLENDE, I. (2013). Eva Luna. Barcelona: Random House Modadori.
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